Desde hace aproximadamente treinta años, la confianza en la educación perdió algo de su ingenuidad y de su encanto, sobre todo en las sociedades que alcanzaron un alto nivel de escolarización. No sólo las sociedades fuertemente educadas y escolarizadas no son todas más cohesivas, tolerantes y democráticas de lo que pudieron serlo en un período anterior, sino que no alcanza con desarrollar la educación escolar para reducir las desigualdades sociales. Sobre este punto, este libro nos permite ver con mayor claridad distinguiendo varios mecanismos.
Cecilia Veleda no se propone dar consejos políticos, no obstante lo cual es de esperar que los responsables de las políticas educativas lean su libro atentamente. Verán entonces que es posible mejorar el sistema educativo percibiendo el juego de las micro-decisiones y de las micro-regulaciones inducidas por los actores de la escuela.
Verán que la Sociología no consiste únicamente en criticar la vida social, sino que puede ayudar a mejorar las sociedades, a reducir la distancia entre los principios ostentados por las instituciones y la realidad.