Tras el éxito obtenido con El corazón es un cazador solitario a la temprana edad de veintitrés años, Carson McCullers escandalizó a la opinión pública americana con Reflejos en un ojo dorado, abordando, en esta su segunda novela, temas como la homosexualidad, la infidelidad o la desolación en el contexto de una intachable institución del ejército americano durante la década de los treinta. Nadie ha dudado jamás, sin embargo, de que es una novela perfecta escrita en estado de gracia.
En el ambiente enclaustrado de una base militar, un islote aparte en el mundo, un precipitado de tensiones internas desemboca en una muerte violenta. La prosa rabiosamente lúcida que recorre Reflejos en un ojo dorado, convierte esta novela brutal en mucho más que la historia de un crimen: es un microcosmos, el espejo de los fantasmas interiores que pueblan la mente de los personajes de Carson McCullers, y una de las más acabadas muestras del arte de esta escritora excepcional, que inspiró una ya clásica adaptación cinematográfica dirigida por John Huston, con Marlon Brando y Elizabeth Taylor en los papeles principales. Un título esencial de la narrativa norteamericana contemporánea.
MCCULLERS CARSON
Carson McCullers, nacida Lula Carson Smith en 1917 en Columbus, Georgia, fue una destacada escritora estadounidense. A los 23 años alcanzó la fama con su primera novela, El corazón es un cazador solitario, donde exploró temas como la soledad, la incomunicación y la vida de los marginados en el sur de EE. UU.
A lo largo de su carrera escribió novelas, cuentos, obras de teatro y ensayos, destacándose también Reflejos en un ojo dorado y La balada del café triste. Su estilo, cercano al gótico sureño, se caracteriza por personajes excéntricos y una profunda sensibilidad emocional.
McCullers vivió una vida marcada por la enfermedad y el dolor físico, pero nunca dejó de escribir. Falleció en 1967 a los 50 años, dejando un legado literario que sigue conmoviendo por su humanidad y profundidad.