POEMAS DE SHELLEY - BILINGÜE
Los poemas de Mary Shelley Londres, Reino Unido, 1797-1851 quedaron en gran parte inéditos en vida de la autora y han permanecido hasta hoy prácticamente desconocidos para el público. No es raro en la historia literaria que el gran éxito de un autor en un género determinado ensombrezca el resto de su obra incluso a sus propios ojos. Pero la enorme calidad de la poesía de Mary Shelley hace necesario conocerla y sacarla a la luz como en muy pocos de esos casos. Dotada de esa extraordinaria intuición solo al alcance de los grandes talentos que antes de cumplir los veinte años la llevó a crear una obra maestra como Frankenstein, Mary Shelley vuelva su dolor, sus recuerdos y su profunda melancolía en unos poemas íntimos, palpitantes y obsesivos, nacidos al calor de una sensibilidad en carne viva, pero también de una mente enérgica e inconformista que desesperadamente busca asideros en el abismo de una existencia trágica. Pero, incluso cuando nos hallamos ante puras destilaciones del dolor más íntimo, los versos de Mary Shelley cuentan con el poso de una madurez creadora que sabe dar serena y sólida arquitectura a la expresión poética, tanto en sus manifestaciones más breves y musicales como en los poemas más extensos y discursivos.
Edad recomendada: Adultos.
SHELLEY MARY
30 de agosto de 1797, Londres - 1 de febrero de 1851, Londres.
Mary Wollstonecraft Shelley tiene un lugar en el olimpo de la literatura gracias a una obra brillante y seminal: Frankenstein o el moderno Prometeo. Hija única de un matrimonio de intelectuales, el filósofo William Godwin y la escritora y pionera del feminismo, Mary Wollstonecraft, Mary recibió una educación exquisita. Siendo apenas una adolescente, en 1812 conoció al poeta Percy Shelley y se fugó con él a Francia. Se casaron en 1816, cuando la primera esposa del poeta se suicidó. El verano de ese año, la pareja coincidió en una villa en Suiza con John Polidori y Lord Byron. Este último, a modo de juego, retó a sus amigos a escribir una historia de terror. Ese fue el germen de Frankenstein, considerada por muchos expertos la primera novela de ciencia ficción de la historia, creando además uno de los arquetipos más reconocibles del género: el científico loco. Aunque Victor Frankenstein, más que un personaje loco, es el retrato de un hombre que, queriendo imitar a los dioses, acaba por crear un monstruo.