ONE GORILLA - A COUNTING BOOK
In this elegant 1-10 counting board book, Anthony Browne out-does himself with a vivid presentation of primates from gorillas to gibbons, macaques to mandrills, ring-tailed lemurs to spider monkeys. With his striking palette, exquisite attention to detail and quirky flair for facial expressions, the former children's laureate slyly extends the basic number concept into a look at similarities and differences - portraying an extended family we can all count ourselves part of, and a home planet that we should all try to protect.
ANTHONY BROWNE
Anthony Edward Tudor Browne CBE born 11 September 1946 is a British writer and illustrator of children's books, primarily picture books. Browne has written or illustrated over fifty books, and received the Hans Christian Andersen Award in 2000. From 2009 to 2011 he was Children's Laureate. Browne won two Kate Greenaway Medals from the Library Association, recognising the year's best children's book illustration. For the 50th anniversary of the Medal 1955-2005 , a panel named his 1983 medalist Gorilla one of the top ten winning works, which composed the ballot for a public election of the nation's favourite.
Edad recomendada: A partir de 3 años.
BROWNE ANTHONY
Sheffield, Inglaterra, 1946 . Aunque estudió diseño gráfico, en realidad quería ser pintor. Después de acabar la carrera se dedicó a hacer ilustraciones médicas para ganarse la vida. También incursionó en el campo de la publicidad, aunque no lo disfruto mucho, y dibujó durante muchos años tarjetas de ocasión. Finalmente descubrió los libros para niños, y en los treinta años que lleva haciéndolos ha producido más de cincuenta aunque sigue dibujando tarjetas de ocasión entre libro y libro . Su esposa es violinista y tienen dos hijos, Jospeh y Ellen, un perro y un gato. Este autor, considerado uno de los más importantes escritores e ilustradores contemporáneos de libros para niños y jóvenes, invita a sus lectores a desarrollar la capacidad de observación. En sus libros el texto y la ilustración están íntimamente relacionados. Cada paisaje, cada gesto de sus personajes, cada escena de acción, posee señas particulares que muevan al lector a mirarlo una y otra vez a la espera de enriquecer aún más la experiencia lúdica de su lectura. Anthony Browne acerca a los niños a mundos diferentes: al de los animales, al de los adultos e incluso a los suyos propios en una introspección que resulta enriquecedora y tierna a la vez.
