Los seres humanos ya escribían listas incluso antes de empezar a escribir cartas. Sumarias y concisas, las listas son la expresión abreviada de lo que nos importa de verdad: una manera de dejar constancia de nuestras expectativas y aspiraciones más íntimas, de lo que nos gusta y lo que nos desagrada, de las reglas para la vida o para el amor; las listas nos sirven para consignar los recuerdos o para no olvidar lo que querríamos hacer antes de morir.
Al igual que en su celebrada recopilación de cartas Cartas memorables, Salamandra, 2014 , Shaun Usher ha rastreado los archivos de medio mundo para crear una antología igualmente diversa y entretenida, que abarca desde la edad antigua hasta el presente, e incluye desde una lista de tareas pendientes de Leonardo da Vinci a la de propósitos para el año nuevo de Marilyn Monroe, o la lista en la que Charles Darwin detalla los pros y los contras del matrimonio.
Incluye, entre otras muchas:
o La lista del antiguo Egipto en que se clasifica los sueños
o La lista de la compra ilustrada de Miguel Ángel
o Las estrictas condiciones que Einstein impuso a su esposa
o La lista de inventos pendientes de Thomas Edison
o La lista de Picasso con los participantes en The Armory Show
o El decálogo de la mafia de Salvatore Lo Piccolo
o Las cosas por las que preocuparse según Francis Scott Fitzgerald
o Los consejos para jóvenes rockeras de Chrissie Hynde