La soledad es la melancolía que se siente por la ausencia de algo o
alguien. Hoy en día existe otro tipo de soledad: la buscada, la hallada
más allá del abismo de la angustia.
Catherine Millot nos relata en esta novela cómo en su vida esa
experiencia de lo sin límite se le impone, y cómo parece estar a punto
de aniquilarla. Pero también nos cuenta cómo a través de la escritura
consiguió cruzar los umbrales del miedo. De esta manera, construye, de
lo que parecía un precipicio sin fondo, un lugar donde vivir.
La escritura solitaria, la lectura de lo escrito por otros solitarios,
desemboca en una maraña de significados que las palabras comunes,
atrapadas en la red del vínculo social, no alcanzan. Y lo que descubre
nos concierne a todos.
"A través de la combinación de erudición e intimidad, esta obra logra
una exploración brillante del aislamiento y del vértigo de la existencia."
Télérama, Francia
"Visitamos con ella diversas regiones del mundo a las que ama, pero
sobre todo viajamos en nosotros mismos para comprender nuestras
propias contradicciones, nuestros amores felices o infelices, así como
nuestro deseo de soledad y también, a veces, el miedo al abandono."
Josyane Savigneau, Le Monde, Des Livres, París.