Un libro que nos adentra en el universo de un autor fundamental en el siglo XX y cuyo legado sigue siendo imprescindible en el siglo XXI
Toda la obra de Viktor E. Frankl está impregnada del profundo conocimiento del ser humano que tenía su autor, y de una visión humanista que nunca lo abandonó y que lo impelía a buscar a toda costa un sentido a la vida del individuo concreto y de la existencia humana. Así, a pesar de los años terribles marcados por su reclusión en campos de concentración nazis, sus reflexiones sobre el sufrimiento y la libertad esencial del ser humano ponen de relieve en todo momento el valor de la vida y nuestra capacidad para sobreponernos a las peores adversidades.
Este libro recoge tres conferencias y un esbozo autobiográfico hasta ahora inéditos en castellano. Liberado en de su condición de prisionero judío, Frankl regresó a Viena donde se encargaría de dirigir la Policlínica Neurológica y retomaría la actividad académica. En pronunció tres conferencias que poco después verían la luz en forma de libro y donde empezaba a dejar testimonio de su dolorosa experiencia en los campos. El esbozo autobiográfico que completa este volumen constituye una aproximación valiosa a su trayectoria vital e intelectual.
FRANKL VIKTOR E.
Viktor Frankl 1905-1997 es uno de los referentes más destacados de la psicología del siglo xx. Doctorado en Medicina y Filosofía por la Universidad de Viena, fundó la logoterapia, también denominada Tercera Escuela Vienesa de Psicoterapia. En 1942, en pleno apogeo de los nazis, él y su familia fueron hechos prisioneros e internados en los campos de concentración. Fue precisamente esta experiencia la que lo llevaría a confirmar vivencialmente su teoría psicológica desarrollada en las décadas anteriores basada en el sentido de la vida y con raíces existencialistas. Tras sobrevivir al Holocausto, fue profesor de Neurología y Psiquiatría en la Universidad de Viena y obtuvo la cátedra de Logoterapia en la Universidad Internacional de San Diego, California. Impartió conferencias en universidades de todo el mundo y 29 de ellas le otorgaron el título de doctor honoris causa. Galardonado con numerosos premios, entre ellos el Oskar Pfister Award de la American Psychiatric Association, fue miembro de honor de la Academia Austriaca de las Ciencias.