Las aventuras de Anaconda Horacio Quiroga En el corazón de la selva misionera, Lanceolada, una víbora yarará, descubre la llegada del Hombre y, con él, el peligro de la devastación. Alertadas, las víboras planean enfrentar la amenaza y para ello convocan a una reunión extraordinaria: el Congreso de las víboras. En el seno de esa congregación surgirán voces temerosas y temerarias, cautas e impulsivas y, como en todo congreso que se precie, rencores, ambiciones y rivalidades. Entre todas las asistentes a la reunión, la joven pero imponente Anaconda buscará la manera de defender a sus hermanas a la vez que expondrá su vida para salvaguardar las leyes de la selva de aquellos que no piensan en el bien común sino en sus propias ambiciones. Muchos años después de aquel episodio, Anaconda, convertida en la más temible presencia de la selva, debe enfrentarse, junto con todos los animales, a un enemigo letal: la sequía. Pocos animales en la historia de la literatura han merecido el honor de llevar un nombre propio. Anaconda merece ese privilegio.
QUIROGA HORACIO
Nació en Salto, Uruguay el 31 de diciembre de 1878
Falleció el 1 de febrero de 1937
GéneroLiteratura y ficción
InfluenciasRudyard Kipling, Rubén Darío, Leopoldo Lugones, Edgar Allan Poe.
Horacio Silvestre Quiroga Forteza fue un novelista, poeta y sobre todo cuentista uruguayo.
Escribió historias que, en sus escenarios selváticos, utilizan lo sobrenatural y lo extraño para mostrar la lucha del hombre y el animal por sobrevivir. También se destacó por retratar enfermedades mentales y estados alucinatorios. Su influencia se puede ver en el realismo mágico latinoamericano de Gabriel García Márquez y el surrealismo posmoderno de Julio Cortázar.