LA CUMBIA ANUNCIA EL FIN
Garrido vuelve al barrio porque le "robaron" a su chica, la Vane. Se la "robó" el Chelo, un rati corrupto al que conoce desde la infancia. Garrido sabe que va a tener que reconciliarse con su antigua banda, a la que traicionó, porque solo no tiene poder de fuego para enfrentar a la policía del Chelo. Es la única manera de que exista una chance de recuperar a la Vane: quizás puedan dejar de lado las diferencias frente a un enemigo común, pero el pasado es una furia inquieta.
Cristian Acevedo escribió un western villero, bien del oeste del conurbano, una novela feroz y directa con aires de Okupas y de Leonardo Oyola, en la que la vida vale poco mientras la tensión de la calma que antecede a la tempestad crece, página a página, precipitándose hacia un final inevitable, épico y bonaerense.
Novela exquisita que refleja un manejo del lenguaje específico hasta la perfección, La cumbia anuncia el fin es un acabado ejemplo de lo que daremos en llamar "épica negra" es decir, síntesis de la lucha heroica en un ámbito, y bajo reglas de una marginalidad que siembra la paradoja del género. - Sebastián Porrini
¿Un Clint Eastwood mulo y villero? ¿Una Barbara Stanwyck conurbana? ¿Un Wyatt Earp obeso y corrupto? Sí, Acevedo puede. Ah, y no es kétchup esa sustancia carmesí que rezuma de los cuerpos: este choripán western no lleva aderezos Pol-kianos. Lo mismo pasa acá, puede estar pasando dos o tres calles más allá, al fondo, y por cualquier otro asunto. - Pablo Laborde
Edad recomendada: Adultos.
ACEVEDO CRISTIAN
CHRISTIAN ACEVEDO nació en 1980 en Saladillo, Buenos Aires. Reside
en Bella Vista, donde se dedica a escribir.Acevedo ha publicado tanto novelas como relatos, algunos de ellos han llegado a formar parte de antologías literarias. Su novela Matilde debe morir se convirtió en un fenómeno editorial. Posteriormente, publicó Matilde decide vivir y Todas las vidas de Eva Ki, una obra de ficción especulativa.
A lo largo de su trayectoria el autor ha sido reconocido con premios como el Gonzalo Rojas Pizarro de Cuento 2013 y el Premio de Cuento Bernardo Kordon 2018, quedando finalista de otros tantos.