Ciudades infernales, naufragios, multitudes sin rostro, tripulación fantasmal, mujeres aterradoras, misterios, asesinatos, el amor como maldición¿ En esta selección de cuentos de Poe EE.UU., 1809-1849 el universo del genial escritor estadounidense se despliega en toda su magnificencia.
Los once cuentos que integran el volumen están encabezados por las míticas historias policiales de Poe: "Los crímenes de la calle Morgue", "El misterio de Marie Rog t" y "La carta robada", textos que significaron la inauguración de un género, la creación de una figura de detective muy particular y como señaló Borges, la aparición de un nuevo tipo de lector, el lector de policiales, que desarrolla una forma de leer "detectivesca".
Por su parte, Auguste Dupin, detective aficionado y figura del buen lector por antonomasia con sus técnicas curiosas, resuelve los misterios casi sin moverse de la casa, fumando, en amena conversación con su amigo. Así esclarece los enigmas: en la oscuridad del living, con la luz de su intelecto, sin depender jamás del azar o de una prueba material.
POE EDGAR ALLAN
Hijo de actores ambulantes que nunca conoció, Edgar Allan Poe fue acogido al cumplir dos años por la familia de un comerciante que marchó a Inglaterra en 1815. Cursó sus primeros estudios en internados de Londres y Stoke Newington. Asistió brevemente a la Universidad de Virginia y a la academia militar de West Point. En 1827 publicó Tamerlan y otros poemas, que incluía versos escritos a los catorce años. Ocupó su vida en bares, salas de juego y tribunales de justicia; colaboró con efímeras publicaciones y se enemistó con todos sus colegas. En 1833 The Saturday Visitor premió su Manuscrito encontrado en una botella. Tres años después se desposó con su joven prima y acometió la redacción de las más altas historias de terror y suspense del siglo, prefigurando la literatura del siguiente. En 1841 Los crímenes de la rue Morgue inauguró el género policial. Edgar Allan Poe sobrevivió tres años a la muerte de su esposa. Vencido por el delirium tremens, murió el 7 de octubre de 1849 en la sala común de un hospital de Baltimore.