El no era un hombre civilizado o domenable. Tenia su propio codigo, y vivia de acuerdo con el. Monje. Cazarrecompensas. Asesino de vampiros. Andre Boroi habia pasado siglos combatiendo a los no muertos, resistiendo a la oscuridad con honor. Pero ahora, gravemente herido por un maestro vampiro, Costin Popescu, sera facil seguirle: su sangre va dejando un rastro mortifero para Popescu y su banda de esbirros hambrientos. La unica posibilidad de Andre es desaparecer entre la bruma gris de los montes Carpatos. Esperar. Tener esperanza Ella tenia el toque de una sanadora y un aroma que para el era la sangre que le corria por las venas. En las montanas, a la busqueda de un cristal precioso, la geologa Teagan Joanes de pronto acaba siendo perseguida por las personas en quienes confiaba. Y entonces se encuentra al guerrero..., herido, necesitado e irresistible. Andre se ha pasado la eternidad anhelando su presencia: la de su companera eterna. Su calidez lo envuelve. Su aroma palpita. Y, a cada latido de su corazon, Teagan se rinde a una pasion que no puede comprender. Ahora estan unidos por el destino, pero sera suficiente para mantenerlos a salvo de la oscuridad acechante e implacable que amenaza con engullirlos?