ENSAYOS REUNIDOS - 978-987-8979-64-9
Edad recomendada: Adulta
ABELARDO CASTILLO
1935-2017 nació y murió en Buenos Aires. Practicó todos los géneros literarios con igual brillantez: es sin duda uno de los maestros del cuento latinoamericano, sus novelas son deslumbrantes, sus obras de teatro revitalizaron la escena argentina en los años 60 y lo mismo puede decirse de las tres revistas que dirigió: El Grillo de Papel, El Escarabajo de Oro y El Ornitorrinco. Escribió los siguientes libros: Las otras puertas cuentos, 1961 , El otro Judas teatro, 1961 , Israfel teatro, 1964 , Cuentos crueles cuentos, 1966 , La casa de ceniza novela, 1968 , Sobre las piedras de Jericó teatro, 1968 , Las panteras y el templo cuentos, 1976 , El señor Brecht en el Salón Dorado teatro, 1982 , El que tiene sed novela, 1985 , Las palabras y los días ensayos, 1989 , Crónica de un iniciado novela, 1991 , Las maquinarias de la noche cuentos, 1992 , Ser escritor ensayo, 1997 , El oficio de mentir entrevista, 1998 , El Evangelio según Van Hutten novela, 1999 , El espejo que tiembla cuentos, 2005 , Desconsideraciones ensayos, 2010 y los monumentales dos tomos de sus Diarios 2014 y 2019 . Sus libros han sido traducidos a catorce idiomas.
SINOPSIS
Hay palabras, hay días y des consideraciones. Pero en estos Ensayos reunidos, no se trata de ser desconsiderados: irreverentes sí, irrespetuosos, no. Quizás suene curioso plantearlo en estos términos, pero la primera hipótesis -o conjetura, si se prefiere un término de novela de enigma- es que los escritos, artículos y ensayos que se reúnen en los volúmenes Las palabras y los días y Desconsideraciones resultan más personales que los cuentos y las novelas de Abelardo Castillo. Y con esto no queremos significar nada del or-den de lo autobiográfico como determinante, y menos todavía postular alguna noción acerca de una supuesta objetividad de la ficción en general y de la suya en particular, ni negar que Castillo siempre escribió poniendo el corazón en el centro de la escena. Lo que queremos sugerir es que el efecto de algo íntimo, propio, muy pero muy personal, casi como un cuerpo a cuerpo, se ahonda y visibiliza más en el Castillo ensayista. Las huellas de los otros se hacen visibles en sus ensayos. Ser escritor es en Abelardo Castillo, una cuestión personal. CLAUDIO ZEIGER