Esta Segunda parte de Enrique IV fue escrita por William Shakespeare, presuntamente en 1597, aunque su publicación recién fue registrada el 23 de agosto de 1600. En ella el genio creativo del autor cierra la descripción y análisis de una época nada brillante de la nobleza británica, poniendo al alcance imaginativo de lectores e intérpretes escénicos síntomas de gran descomposición y corrupción moral. La aparición del Rumor en el prólogo dará la clave de todas las acciones tanto de las "históricas" como de las "cómicas". Esta Segunda parte resulta entonces imprescindible para completar acabadamente el conocimiento de todo el período histórico en el que transcurre.
SHAKESPEARE WILLIAM
Bautizado el 26 de abril de 1564, Stratford-upon-Avon, - 23 de abril de 1616, Stratford-upon-Avon.
William Shakespeare fue un poeta, dramaturgo y actor inglés, considerado el más grande autor dramático de todos los tiempos. Resulta muy difícil hablar de Shakespeare sin caer en tópicos. A pesar de que sus obras se escribieron a caballo entre los siglos XVI y XVII y se representaron en un teatro modesto, la inmensa mayoría han sobrevivido, se siguen representando en todo el mundo y forman parte del acervo cultural. Paradójicamente, la vida del llamado "cisne de Avon" sigue envuelta de misterio. Por no saber, no se sabe con seguridad ni el día en que nació. De hecho, existen conspiranoicos que aseguran que en realidad las obras no las escribió él, sino que simplemente las firmó, y que el verdadero autor fue Edward de Vere, XVII conde de Oxford, que se escondió tras la figura del actor. En cualquier caso, lo importante es su legado. Shakespeare cultivó con igual acierto drama y comedia. De su vasta obra cabe destacar Hamlet, Macbeth, Otelo, El rey Lear, Mucho ruido y pocas nueces y Romeo y Julieta.