En la década del veinte Buenos Aires era una ciudad en plena transformación, a la que había que encontrarle la poesía, la música, la religión y la metafísica. Nuestra realidá vital es grandiosa y nuestra realidá pensada es mendiga. Aquí no se ha engendrado ninguna idea que se parezca a mi Buenos Aires, a este mi Buenos Aires innumerable que es cariño de árboles en Belgrano y dulzura larga en Almagro y desganada sorna orillera en Palermo y mucho cielo en Villa Ortúzar En la década del veinte Buenos Aires era una ciudad en plena transformación, a la que había que encontrarle la poesía, la música, la religión y la metafísica. Eso sostiene Borges en El tamaño de mi esperanza , texto del libro homónimo, publicado por primera vez en 1926 y recuperado tras su muerte. Igual suerte corrió El idioma de los argentinos, de 1928, en el que también se refleja la preocupación por un lenguaje propio, por un español que se lleve bien con la apasionada condición de nuestros ponientes y con la infinitud de dulzura de nuestros barrios. Dos libros de ensayo que nos permiten apreciar los inicios de Borges como escritor, sus preocupaciones, sus desvelos, sus incredulidades y las haraganerías de la esperanza.
BORGES JORGE LUIS
Nació en Buenos Aires el 24 de agosto de 1899. Entre 1914 y 1921 vivió con su familia en Europa. A su regreso funda las revistas Prisma y Proa, y publica Fervor de Buenos Aires 1923 e Historia universal de la infamia 1935 . Autor de poesía, cuento, ensayo y trabajos en colaboración, en las décadas siguientes su obra crece, es traducida a más de veinticinco idiomas y alcanza reconocimiento mundial. Fue presidente de la Sociedad Argentina de Escritores, director de la Biblioteca Nacional, miembro de la Academia Argentina de Letras y profesor de la Universidad de Buenos Aires. Recibió importantes distinciones de gobiernos extranjeros, y el título de doctor honoris causa de las universidades de Columbia, Yale, Oxford, Michigan, Santiago de Chile, La Sorbona y Harvard. Obtuvo, entre otros galardones, el Premio Nacional de Literatura Argentina, 1956 y el Cervantes España, 1979 . Considerado uno de los más importantes escritores en lengua hispana de la historia de la literatura, murió en Ginebra el 14 de junio de 1986.