Yo tengo vergüenza de muchas cosas: mis brazos demasiado largos, mis pies enormes, mi cuerpo tan desgarbado que no logro disimular ni con buzos extragrandes. También de que mi mamá esté embarazada porque ¿quién tiene un hermano a los 14 años? . Pero sobre todo me avergüenza mi cara: una constelación de infinitos granos. Por eso, fue genial cuando el mundo se detuvo con la pandemia y llegaron los barbijos tapa-todo. Con la cara oculta me convertí en otra persona, alguien capaz de hacer cosas que nunca hubiera imaginado. Además, conocí a Liz. Y a Melina: eso fue lo mejor de todo.
En época de pandemia las cosas se complicaron para todos. Y Roberto, por pedido expreso de su mamá, tuvo que ayudar a sus vecinos mayores con las compras y los mandados. Lo mejor de todo ese tiempo fue la imposición del barbijo. Porque cuando uno es adolescente y las dudas le llenan la existencia, nada mejor que ir cubierto de pies a cabeza para enfrentar los días y pasar desapercibido. O mejor dicho, solo llamar la atención de quienes sí queremos que nos vean. Un amor que hay atreverse a jugar, una pandemia que ahoga, una madre embarazada que ya tiene un hijo adolescente y una pareja nueva, una vecina muy mayor que ilumina con sus ocurrencias.
Un acto de valentía extrema puso a Roberto en el foco de todos los comentarios. Algunas máscaras que ocultan lo que prefiere no mostrar, y varios dibujos que darán inicio a una excelente historia.
FERRARI ANDREA
Andrea Ferrari nació en Buenos Aires en 1961. Es periodista, traductora y escritora de literatura infantil y juvenil. Inició su carrera en la revista El Porteño y fue parte del equipo fundador del diario Página 12, donde trabajó durante más de quince años. En 2001 publicó su primer libro, Las ideas de Lía, y en 2003 obtuvo el Premio El Barco de Vapor con El complot de las flores. En 2007 ganó el Premio Jaén de Narrativa Juvenil con El camino de Sherlock. Sus obras han sido traducidas a varios idiomas y seleccionadas por la Biblioteca Internacional de la Juventud de Múnich.