Se cumplen 250 años del nacimiento del padre de la
geografía moderna
Humboldt fue científico, viajero, inventor y llegó a ser una
de las personas más admiradas de su época. Heredero de
la Ilustración, abandonó su Berlín natal guiado por sus
inquietudes, recorrió gran parte de Europa y, tras muchas
peripecias, consiguió embarcarse en una expedición para
explorar el Nuevo Mundo.
No había nada que escapara a su interés: coleccionó
muestras de plantas locales, estudió las especies más
peculiares, anotó las variaciones climáticas e hizo grandes
contribuciones a todos los campos de la ciencia. Hijo del
romanticismo alemán, aportó al estudio de la naturaleza
una visión nueva, llena de sentimiento y pasión.
Un hombre fuera de lo común, que desafió todas las
expectativas de quienes le rodeaban y logró reivindicar su
particular visión del mundo.