Jugar a las adivinanzas es como jugar a las escondidas pero con palabras. Las adivinanzas nos intrigan, dejándonos imaginar ¡más de un poquito! y haciéndonos pensar ¡mucho! Hasta que ¡zas!, de golpe, comprendemos lo que nos quieren decir. Con las de este libro, podemos entretenernos en cualquier parte, solos o con otros: en casa, en un viaje largo, en el aula o en un recreo. Sin que nos demos cuenta, nos llevarán de la mano del juego a la de la poesía. Así, descubriremos con nuevos ojos los seres y las cosas que vemos -pero sin mirar- todos los días.
PISOS CECILIA
Empezó a escribir a los ocho años, a punta de varita mágica o lápiz negro, y desde ahí no paró. Publicó más de cien libros para niños y jóvenes, entre ellos: Maneki Neko con botas, Una bandada de brujas sobre una pila de ogros y El té de la princesa. Recibió el Premio Hispanoamericano de Poesía para Niños y el Premio de la Fundación Cuatrogatos.